UNA CARTA DE AMOR PARA MI MADRE

Unos días antes de morir mi madre, un amigo de Guatemala escribió unas lindas palabras ella. Hoy, después de muchos días póstumos, deseo ponerlas en mi blog por una razón: «Alentar a otras personas en su lucha contra el cáncer». Una carta de amor para mi madre.

ALENTAR A OTRAS PERSONAS EN SU LUCHA CONTRA EL CÁNCER

Hola Julia:

No nos conocemos en persona, pero creemos en aquel que nos conoce a ambos desde ante que naciéramos.

¡ Eso nos une !

Por favor deme permiso de escribirle, como si tuviésemos años de ser amigos. Me llamo Carlos y debido a una experiencia personal muy dolorosa, me dedico a la investigación y lucha contra el cáncer por medios naturales, los que Dios dejó. Los años me han enseñado a considerar la vida desde un punto de vista diferente. A apreciar aun más las cosas que antes pasaba inadvertidas. Pararse descalzo sobre el césped, escuchar el mar, los grillos, la brisa, las aves en el atardecer, la sonrisa de un bebé y su llanto, un beso, un mirada tierna, una mariposa, etcétera, etcétera, etcétera.

¿Tanto verdad?

Usted y yo nos entendemos, lo sé… porque sabemos lo frágil que es la vida, que hoy somos y mañana ya no. El tiempo ha pasado y no contamos con él. El futuro quién sabe si vendrá. Solo contamos con hoy… hoy… hoy…!

Usted sabe Julia que su enfermedad no es una gripa. Es un mal que quiere quitarle la salud como lo ha hecho con muchos más. Quiere robarle el placer de seguir abrazando a sus hijos y disfrutar a sus nietos. Quiere arrebatarle todo lo hermoso que trae cada amanecer. Probablemente, esto debería ser suficiente para que se deprimiera y quisiera abandonarse a la voluntad del cáncer. Y tendría razón en hacerlo, si no existiera la posibilidad de salir adelante y vencerla.

Pero la buena noticia Julia, es que, si existe esa posibilidad…!

Me escuchó bien, SI EXISTE LA POSIBILIDAD…!

Lo digo en serio, porque lo sé. Aparte de los medicamentos que hacen su parte, la más potente y extraordinaria arma que usted tiene para vencer al cáncer, el Señor se la dejó adentro de su cuerpo.

Se llama: DESEO DE VIVIR…!

Este deseo surge inspirado por la virtud mas extraordinaria de todas:

EL AMOR…!

Por amor, se hacen muchas cosas, tan solo recuerde algunas de ellas. Si, esas que cometemos cuando éramos jóvenes. Pues bien, el amor es capaz de hacernos levantar cuando estamos caídos, el amor tiene la paciencia inagotable del que todo lo cree y perdona, el amor tiene la fe que mueve montañas y cura enfermedades.

El amor…!

En la medida que ame a su familia, a sus hijos, a sus nietos, a usted misma, en esa medida, luchará por sanar contra todo los pronósticos…!

No importa lo que diga la ciencia…!

El amor es fuerza que mueve el universo y puede ser la que destruya el cáncer. Puede estar segura Julia, que no son solo bonitas palabras. Lo que hoy le comparto, me consta, lo sé…!

Suponga que fuese al contrario el caso, suponga que uno de sus seres más queridos fuese quien estuviese en su lugar …

¿aceptaría usted que se dieran por vencidos…?

¿estaría de acuerdo en que se resignaran y no desean luchar más…?

Verdad que no…!

De igual forma, aquellos que la aman y quienes la estamos conociendo atreves del amor de sus hijos, deseamos y necesitamos que no se rinda, que no se resigne, que no se abandone…!

Es importante, muy importante para muchas personas que usted, se levante para volver a reír. Así que, hágalo…! tome la decisión ahora mismo de hacerlo…! Le sugiero que en primer lugar, converse a solas con Jesús. Así como conversan los amigos, háblele de todo lo que hay en su corazón, llore si siente el deseo acurrúquese en sus brazos que extendidos están para recibirla y decirle cuánto la ama…! Qué hermoso es saber que no estamos solos y usted menos…! Aproveche y hable con El. Dígale cuánto desea y necesita vivir. Por usted, por sus hijos, por sus nietos y por aquellos sin esperanza que necesitarán escucharla para que por su testimonio les devuelva esa esperanza.

Vamos hable con Jesús…!

Él es quien da fuerzas al cansado para que vuele como las águilas…!

Propóngase a no dar un paso atrás ni para tomar impulso…! Así dicen en Cuba…! Una vez hecho esto, ahora llame a sus hijos y converse con cada uno de ellos. Necesitan escucharla, dígales una vez más cuánto les ama, cuán orgullosa está de ellos y de lo que son. Dígales cuál es el sueño de su corazón para cada uno y deles las gracias por haberle permitido por muchos años sentirse una mujer completa porque la llamaron mamá. Agradezca junto con ellos a Dios por haber tenido el privilegio de darles la vida y cuidarlos y hacerlos hombres y mujeres de bien. Cuántos hay que no pueden decirlo.

Pero se que usted si tiene el derecho de hacerlo. Una vez hecho lo anterior, ahora piense si hay alguna persona a la que quizás deba hablarle para estar en paz. Si así fuera, hágalo…! Sabe Julia…? todo lo que le he sugerido que haga, deberíamos hacerlo todos los que vivimos en este mundo, sea que estemos enfermos o no. No existirían ateos, ni divorcios, ni malos hijos, ni enemigos, viviríamos tal y como el Padre siempre ha querido: en paz.

Todo lo anterior, no se hace porque uno vaya a morir, sino por el contrario, porque al fin hemos decidido comenzar a vivir. La vida Julia, no depende de pulmones que se llenen de oxígeno, sino de un alma aferrada a la fuente de la vida que es el Señor. Hoy al hacer lo que le he dicho, más que los pulmones, se podrá llenar el alma del Espíritu de Dios. Será El quien renueve cada célula de su cuerpo y le permita comprender que la vida no está en este mundo sino en el que está por venir, cuando El regrese. Bien, ahora, ha llegado el momento de que con paciencia, fe y perseverancia, siga las instrucciones de los médicos y tome cada uno de los medicamentos que le den. Si buscamos primeramente el reino de Dios y su justicia, incluso la vida vendrá por añadidura.

No he sentido el tiempo conversando con usted, me da la impresión que nos llevaríamos muy bien. Así que ahora, también necesitamos que se cure para que nos podamos conocer. Aprecio mucho el tiempo que me ha brindado para escuchar mis letras. Con todo respeto, reciba un abrazo en el nombre de Aquel que la ama tanto, que se viste de muchos rostros para decirle que está a su lado, muy atento…!

Dr. Carlos Navas.